Las enfermedades de transmisión sexual más frecuentes

Las enfermedades de transmisión sexual afectan de manera directa la calidad de vida de las personas. Conocerlas, entender cómo se transmiten y cuáles son sus síntomas es fundamental para prevenir su propagación y proteger tu salud reproductiva.

Las ETS más comunes requieren de atención. Es crucial estar informados sobre estas infecciones sexuales para tomar las medidas preventivas necesarias y actuar a tiempo en caso de contagio, especialmente si estás en búsqueda de un embarazo o si querés donar tus óvulos.

Las ETS más comunes, ¿afectan la fertilidad?

Las enfermedades de transmisión sexual no solo son un problema de salud debido a sus síntomas y complicaciones inmediatas, sino también por los efectos a largo plazo que pueden tener en la fertilidad de quienes las padecen.

Según la Organización Mundial de la Salud, las ETS tienen repercusiones profundas en la salud sexual y reproductiva, incluidas consecuencias graves como enfermedades neurológicas y cardiovasculares, infertilidad, embarazo ectópico y muerte prenatal.

Es por esto que el conocimiento y la prevención de las ETS más comunes se vuelven esenciales, especialmente en etapas donde la planificación familiar se considera. La detección temprana y el tratamiento adecuado son claves para minimizar el impacto que estas enfermedades pueden tener en la capacidad reproductiva.

De acuerdo con la doctora Cintia Granados, de WeBank, estas enfermedades pueden presentar diversos síntomas y signos e incluso, muchas veces, son asintomáticas pudiendo pasar desapercibidas hasta que ocurren las complicaciones.

Nuestra especialista en Medicina Reproductiva detalla los principales síntomas de las ETS más frecuentes en Argentina:

Síntomas del herpes genital

El herpes genital se manifiesta a través de pequeñas ampollas, como cabezas de alfiler o úlceras dolorosas. Estas lesiones, cuya localización variará según la práctica sexual que ha producido la infección, puedenaparecer de 2 a 20 días después del contacto sexual con una persona infectada.

“Cuando la lesión desaparece el virus queda latente en el organismo y puede producir nuevas reinfecciones en situaciones de defensas bajas o estrés. La mujer embarazada puede transmitir la infección al recién nacido al pasar por el canal de parto y puede generar un cuadro grave en el bebé”, explica la Dra. Granados.

Síntomas de la clamidia

La clamidia con frecuencia no produce síntomas claros, haciendo difícil su detección temprana. En casos donde se manifiestan, en hombres causa secreción transparente y molestias al orinar (uretritis no gonocócica), mientras que en mujeres provoca alteraciones en el flujo vaginal, sangrado tras relaciones sexuales, uretritis o enfermedad inflamatoria pélvica.

Síntomas de gonorrea

Similar a la clamidia, la gonorrea puede ser asintomática o asociarse a síntomas inespecíficos como flujo vaginal amarillento, dolor al orinar, secreción purulenta por el pene en hombres, dolor en las relaciones sexuales, molestias en la garganta, secreciones o sangrado anal.

Síntomas de sífilis

Esta ETS se desarrolla en etapas, comenzando con la aparición de una úlcera indolora en los genitales, la boca o el ano. Si no se trata, puede progresar a una erupción cutánea que incluye las palmas de las manos y las plantas de los pies.

En sus etapas finales, la sífilis no tratada puede causar complicaciones graves, incluyendo daños al corazón y al sistema nervioso. La detección temprana y el tratamiento con antibióticos son cruciales para evitar la progresión de la enfermedad.

“Luego pasa por un periodo de reposo que dura muchos años antes de volver a activarse. En aquellas personas que se vuelve a activar provoca alteraciones cardiovasculares y neurológicas graves y puede ser mortal”, afirma la doctora Cintia Granados.

La especialista de WeBank explica que si una persona gestante está infectada y no es tratada puede transmitir la infección durante el embarazo y/o parto, resultando una sífilis congénita que se asocia a cuadros graves del recién nacido.

Síntomas de tricomoniasis

La Dra. Granados indica que los hombres infectados con esta enfermedad no suelen manifestar síntomas, mientras que las mujeres pueden presentar prurito vulvar, flujo vaginal maloliente amarillo grisáceo y/o dolor al orinar.

Síntomas de Hepatitis B

La hepatitis B se puede transmitir sexualmente, de forma parenteral o congénita, y en la mayoría de los casos cursa sin síntomas aparentes y se cura por sí sola. “En caso de no resolverse, quedan cuadros crónicos con mayor riesgo de patología en el hígado (hepatitis aguda, cirrosis o cáncer)”, afirma nuestra experta.

Síntomas del virus del papiloma humano

El virus del papiloma humano (HPV) puede causar lesiones en los órganos genitales, que varían desde verrugas hasta lesiones que se asocian a mayor riesgo de cáncer de cuello uterino o de genitales externos.

Síntomas del VIH

Puede transmitirse por vía parenteral, sexual o vertical, es decir, de madre a hijo a través de la placenta, en el momento del parto o a través de la leche materna. La infección aguda puede no tener síntomas o dar un cuadro semejante a una gripe.

Los síntomas más frecuentes, según la Dra. Granados, corresponden a cuadros de inmunodeficiencia y dependerán de lo avanzado de la enfermedad al momento del diagnóstico.

Después de repasar los síntomas de las enfermedades sexuales más frecuentes, es vital destacar la importancia de la detección precoz. Muchas ETS pueden ser asintomáticas, lo que significa que podrías estar infectado sin siquiera saberlo.

Esto subraya la necesidad de realizar chequeos regulares, especialmente si tenés una vida sexual activa con múltiples parejas o si considerás iniciar una familia. En muchos casos, el diagnóstico se hace a través de exámenes específicos, más allá de la observación de síntomas evidentes.

¿Se debe verificar infecciones sexuales en donantes de óvulos?

La Dra. Granados señala que “aunque no se ha demostrado que se pueda transmitir la enfermedad a partir de los gametos, algunas de las ETS son criterio de exclusión para donación de óvulos”.

Nuestra especialista agrega que entre las enfermedades de transmisión sexual que no permitirían a una mujer ser donante de óvulos están la sífilis, la hepatitis B, el HIV, la gonorrea no tratada, la clamidia no tratada y la tricomoniasis no tratada.

“Algunas ETS pueden generar complicaciones asociados a enfermedad inflamatoria pélvica lo cual trae cambios anatómicos y mayor riesgo de complicaciones durante la punción ovárica siendo también criterio de exclusión”, dice la médica de WeBank.

La experta también destaca que, por diversos factores anatómicos y biológicos, las mujeres son más propensas a adquirir ETS que los hombres. Además, advierte también que es menos probable que una mujer tenga síntomas pasando más desapercibida y retrasando el diagnóstico.

Desde WeBank, alentamos a todos a tomar un rol activo en tu salud sexual, realizando consultas regulares y buscando asesoramiento médico cuando sea necesario. Recordá que cuidar de tu salud sexual es cuidar de tu futuro y el de tu familia.

Dra. Cintia Granados

Medicina Reproductiva
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